Hace más de diez años estaba donde tú, con una perrita que a todo le ladraba y sin idea de cómo ayudarla. Probé de todo, y sólo encontré metodologías y entrenadores que no sólo no me daban resultados pero que también me alejaban del vínculo que quería forjar con Kiara.

Sin embargo, me topé con la educación empática, y desde ese día me he dedicado a formarme y capacitarme en la modificación conductual libre de fuerza. Al empezar a educar a Kiara con metodologías basadas en el respeto, que la entienden como individuo, que realmente van a la raíz a buscar el por qué de sus conductas, es cómo por fin logré los avances que quería y me acerqué mucho más a ella.

Yo probé de todo, yo tuve que buscarle, equivocarme, avanzar un paso y retroceder diez, y en todo ese proceso se volvió mi misión que la educación libre de fuerza no fuera tan difícil de encontrar ni de entender. Todo perro merece una educación sin castigos, y toda persona merece realmente entender y disfrutar de su perro. Con esa visión nació Down Sit Play, donde quise poder poner la educación amable y eficiente en un formato divertido, fácil de entender y dónde tú eres el protagonista de la educación de tu perro. Mi lema es que yo te ayudo a que aprendas a disfrutar a tu perro.

Soy feliz de ver que cada vez son más los perros libres de collares de ahorque, miedo y castigos y más las familias que logran entenderlos, guiarlos y apoyarlos a ser felices y vivir una vida de disfrute mutuo. Llevo más de una década y sigo aquí, aprendiendo, creciendo y sumando a que todos disfrutemos más a nuestros perros.